Con total impunidad, el jovencito violentó la entrada de la propiedad y se llevó muebles para venderlos.
En la madrugada de este jueves, personal policial de la Comisaría Segunda realizaba un patrullaje por calle Urdinarrain al numeral 800.
Fuentes policiales informaron que en ese momento observaron que un sujeto salía de un domicilio sacando una cama de madera.
Se identificó al individuo en cuestión, quien resultó ser un jovencito de 16 años de edad.
Además, los efectivos policiales constataron que la reja de metal de la puerta del frente de la vivienda estaba forzada.
Un vecino, debido a la situación, hizo entrega en forma voluntaria de una mesa de madera que momentos antes le había comprado al menor.
Posteriormente, el fiscal en turno dispuso la aprehensión del joven y su traslado a comisaría de Minoridad.
